La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha llegado a considerar a las enfermedades alérgicas entre las 6 patologías más frecuentes del mundo. Se estima que pueden afectar al 25-35% de la población mundial, resultando más afectados los países desarrollados e industrializados que el resto. La rinitis alérgica es el proceso más frecuente, y puede a afectar al 21 % —en promedio— de la población general española, aunque existen apreciables diferencias geográficas.Igual sucede con el asma, que oscila entre el 1 y el 10% de la población general, pero es más frecuente en zonas costeras e insulares que en las zonas del centro de la península, siendo el promedio europeo del 6%. La dermatitis atópica les sigue en frecuencia, pudiendo padecerla hasta un 20% de los niños en edad escolar. Más informaciónLa alergia a los alimentos afecta al 3-8 % de la población infantil, y al 2-5% en los adultos. La alergia a los medicamentos es el tercer motivo de consulta en las consultas de alergia, con un 17%. En lo que concierne a los alérgenos —sustancias que provocan una reacción alérgica— es importante considerar su forma de acceso al organismo, dado que aquellos que comparten puerta de entrada presentan otros muchos aspectos en común. Alérgenos inhalados: pólenes, ácaros, hongos, mascotas e insectosLos alérgenos inhalados son los que más frecuentemente producen alergia y se distinguen si son de interior (dentro de las casas) o de exterior. Los primeros habitualmente producen síntomas durante todo el año, mientras que los de exterior son más frecuentemente estacionales.Los pólenes son alérgenos de exterior: Son pólenes alergénicos suelen ser anemófilos (transportados por el viento), pues es raro que las plantas cuya polinización se efectúa a través de los insectos causen alergia. Las plantas alergénicas se agrupan en árboles, hierbas y malezas. Los pólenes pueden llegar a recorrer varias decenas kilómetros llevados por el viento. Lo síntomas que origina suelen aparecer en determinadas épocas del año, las que corresponden a las de polinización de las plantas.Los ácaros del polvo doméstico: Son insectos arácnidos, microscópicos, de unos 0,33 mm de largo, que viven a nuestro alrededor y se encuentran en el polvo doméstico, siendo sus heces los productos más alergénicos. Se desarrollan mejor en zonas costeras y se encuentran mayoritariamente en colchones, ropa de la cama, almohadas, muebles, moquetas y tapicerías.Los hongos: También se los denomina mohos y pueden ser de interior y de exterior. Crecen en ambientes húmedos y cálidos, y mejor en la penumbra. En el exterior, aparecen en zonas mal drenadas donde se acumula la humedad y, en el interior, preferentemente en baños y sótanos con humedades o goteras.Las mascotas: Los alérgenos de origen animal proceden en su mayoría de especies domésticas y se consideran alérgenos de interior. Las moléculas alergénicas provienen de la saliva, la orina, el pelo, las plumas y las escamas de piel. Las partículas son transportadas por el aire e impregnan los muebles y los tejidos (ropa, cortinas, etc.) del domicilio. Además de los gatos y perros, producen alergia los conejos, hámsteres, pájaros y ratones, y se han desarrollado sensibilizaciones curiosas como a los jerbos, hurones, chinchillas, iguanas, entre otros.Los insectos: Otros animales pequeños, como las cucarachas, también se pueden encontrar en el hogar y ser causantes de enfermedades alérgicas. Los mosquitos y las polillas se han asociado a la alergia en algunas regiones. Alérgenos por vía digestiva: Los alimentosEn España, los alimentos que más habitualmente causan alergia en los niños son la leche, los huevos y el pescado. En los adultos, los alimentos más frecuentemente causantes de alergia son las frutas y las verduras, los frutos secos y los mariscos. También se registran casos de alergias a legumbres, cereales, y carne de vacuno y aviar. La alergia a los alimentos es mayor si las moléculas alergénicas de los mismos están en grandes concentraciones. El potencial alergénico de una proteína alimentaria aumenta si sus epítopos (las partes que reconoce el sistema inmune) están alineados de forma consecutiva. Si estos se encuentran próximos solo por el plegamiento tridimensional de la proteína, son menos estables y su capacidad para inducir una respuesta alérgica intensa disminuye al ser desestructurados por factores como el calor al cocinar o la acidez del estómago. Algunos de estos alérgenos lábiles se encuentran en diversas frutas y verduras y esto explica que, en ciertos pacientes, la fruta produzca reacciones si se ingiere fresca, y sin embargo, se tolere en compota. Por esta misma razón, algunos alimentos alergénicos producen síntomas leves y transitorios en la boca (picor, enrojecimiento), pues al llegar al estómago son destruidos y pierden su potencial alergénico. Se considera también de origen alimenticio la alergia a los parásitos que contaminan los alimentos, como la alergia a la larva del Anisakis simplex del pescado.Alérgenos que se inyectan en el organismo: Picaduras de insectosLa alergia a las picaduras de los insectos constituye un problema importante, pues puede producir fallecimientos en personas sanas. Son probablemente responsables de algunas muertes repentinas e inexplicadas. Cuando el insecto inyecta las moléculas alergénicas, estas tienen acceso directo e inmediato al sistema inmunitario, por lo que las reacciones pueden ser muy rápidas. Las picaduras suelen provenir véspidos y ápidos. Los véspidos (Vespula y Polistes, fundamentalmente) anidan en la tierra fácilmente durante actividades agrícolas o de jardinería; también son atraídos por la comida y merodean en zonas de picnic, especialmente verano y otoño.Los ápidos, que incluyen a las abejas y a los abejorros, suelen ser pacíficos y solo pican cuando son molestados. Las personas pueden ser alérgicas a una o a varias especies, por lo que la identificación del insecto es capital para poder establecer un diagnóstico e indicar correctamente el tratamiento. Otros insectos de interés son las garrapatas de las palomas. Las palomas, frecuentes en las grandes ciudades, se posan en los tejados de los áticos. Allí desprenden sus garrapatas y estas, generalmente por la noche, atacan a los inquilinos de la casa. A veces, es difícil identificarlas como causa de las reacciones alérgicas, ya que se esconden y muchas veces pueden pasar desapercibidas.¿Los medicamentos pueden ser también alérgenos?Sí. Todos los medicamentos pueden provocar reacciones alérgicas. Por ello es importante que solo se administren cuando estén indicados y siempre por prescripción médica. Se deben evitar, por esta misma razón, los tratamientos innecesarios.Los medicamentos que con más frecuencia producen alergia son ligeramente diferentes en los distintos países porque, como los alimentos, suelen corresponder con los más utilizados. En España, los más habituales son los antibióticos, especialmente los derivados de la penicilina, y los antiinflamatorios, como el ibuprofeno. Este contenido se ha editado a partir de textos de la Dra. M.ª Luisa Baeza Ochoa de Ocáriz, médica especialista en Alergología e Inmunología Clínica. Jefe de Sección del Servicio de Alergia del Hospital General Universitario Gregorio Marañón (Madrid). HABLANDO DE ALERGIAS es una colaboración entre la Fundación de laSociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), la Fundación BBVA y EL PAÍS concebida para resolver las dudas más frecuentes que los pacientes trasladan en las consultas de alergología. Las respuestas se basan en el conocimiento experto de un centenar de especialistas, que son los autores de El libro de las enfermedades alérgicas, una publicación multimedia realizada por la Fundación SEAIC en colaboración con la Fundación BBVA.

Hongos, picaduras o alimentos: ¿Cuáles son las principales causas de alergia? | Salud y bienestar
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